El 25 de noviembre, alrededor de las 19:6 horas, los soldados de la Guardia di Finanza encontraron 9.000 máquinas tragamonedas encendidas en el interior de un bar de Noventa Padovana (PD) gestionado por chinos, en violación de las normas regionales sobre límites horarios de juego. Por este motivo, el propietario del negocio fue denunciado ante las oficinas del Ayuntamiento correspondiente por incumplimiento de la legislación autonómica sobre prevención y tratamiento del trastorno patológico del juego, que prevé, en este caso, una multa administrativa de hasta XNUMX euros. euros.

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