(Jamma) “Solo a través de mayores controles, los municipios podrán intervenir para combatir el fenómeno del lavado de dinero en el juego y resaltar la presencia de la administración municipal en la zona como garantía de paz y orden social”. Con estas palabras Angela Fioroni, directora de Legautonomie Lombardia, resumía el tema abordado esta mañana en Milán con motivo de la conferencia titulado 'Juego, blanqueo de capitales, fiscalidad y evasión fiscal: lo que los municipios pueden hacer hoy', en el que participaron una veintena de municipios.
“La reunión de hoy – explicó Angela Fioroni a Jamma – representa un primer paso para abordar un tema muy técnico, a saber, la posibilidad de que los cominis combatan el lavado de dinero a través de sus propias estructuras, no necesariamente vinculadas a los juegos de azar, pero que también se derivan de varios tipos de evasión de impuestos. Hoy hablamos de reciclar con una gama más amplia que la relacionada con el juego. Las actividades de riesgo catalogadas por el ponente Mario Turla, consultor antilavado de dinero, son numerosas, en primer lugar casas de juego, compradores de oro, clubes deportivos, clubes nocturnos hasta empresas de publicidad, empresas de gestión de residuos y empresas públicas. Estas actividades pueden ser controladas directamente por los municipios a través del desarrollo de sistemas informáticos para comparar las bases de datos con que cuentan las AP e identificar situaciones de riesgo en su propio territorio.
En el frente del juego público, los municipios no pueden intervenir a través de instrumentos normativos. Incluso la jurisprudencia opina lo mismo: el Consejo de Estado, consultado por el Ministro del Interior, se pronunció el 26 de septiembre sobre que los municipios no pueden intervenir en el horario de apertura de los salones recreativos -competencia del Cuestor- y que el Tribunal Administrativo Regional de Lazio es el tribunal competente para poder expresarse sobre el asunto.
La herramienta que pueden utilizar los municipios son los controles, a ser realizados en gran número para verificar, por ejemplo, la aplicación de las normas establecidas por el decreto Balduzzi. Por ejemplo, - dice Fioroni - en los lugares de juego donde hay advertencias preparadas por las Autoridades Locales de Salud en un formato visible, se ha observado que los jugadores evitan jugar. La presencia de controles no solo afecta la regularidad de las salas de juegos y establecimientos que albergan dispositivos, sino que también sirve para concienciar a los usuarios sobre este problema y extender los mismos controles a otros problemas también. Sobre todo se evita el juego entre menores. La conexión entre salas de juegos, máquinas tragamonedas y lavado de dinero es un fenómeno constatado por el poder judicial y por lo tanto si el municipio puede intervenir a través de mayores controles, esto beneficiará a toda la comunidad, en aras de la regularidad y la legalidad. Los controles -concluye- permitirán también garantizar la presencia de la administración pública para garantizar la paz social y el orden público”.
